En las últimas semanas se ha acrecentado la cantidad de casos donde supuestos profesionales ofrecen su servicio para alterar los medidores eléctricos de los usuarios, disminuir el registro de consumo y así pagar un monto inferior en su factura. Esta práctica constituye un delito tipificable como Fraude, Hurto y/o Robo, según el Código Penal de la Nación (Art. 162 y 164) y está penado tanto para quien adultera el medidor como para el usuario que contrata a esta persona.
Las manipulaciones indebidas de instalaciones y conexiones eléctricas pueden ocasionar daños materiales tanto para el infractor como para sus vecinos, ya que generan oscilaciones de tensión y cortocircuitos que pueden incluso terminar en incendios. Pero también atentan contra las personas porque pueden derivar en electrocuciones y causar la muerte de habitantes de la vivienda y transeúntes.
Si sabés de estas prácticas ilegales contra el servicio eléctrico, denuncialas anónimamente al 0800-3-333672 ó vía WhatsApp: http://bit.ly/38SwcQ5