La distribuidora mendocina se aggiornó para continuar brindando un servicio eléctrico de calidad a sus más de 450.000 usuarios. Para eso, reforzó las medidas para evitar el contagio de sus colaboradores, primeramente evitando que su personal perteneciente a grupos de riesgo concurriera a las dependencias y luego mejorando los equipos, sistemas informáticos y la conexión, para que aquellos que pudieran realizaran teletrabajo y pudieran participar de sesiones de trabajo remoto en distintas plataformas.
En los inicios de la pandemia EDEMSA gestionó y colocó vacunas antigripales con la última versión para todos los colaboradores e hizo una gran inversión en elementos de seguridad como máscaras faciales, tapabocas y kits de desinfección, entre otros; para aquellas personas con actividades presenciales imprescindibles.
Ante la situación adversa en lo social, la empresa eléctrica colaborío con varios comedores comunitarios y con la Cruz Roja Argentina, pero su gran aporte para paliar los efectos de la pandemia fue patrocinando a un grupo de médicos encabezado por el Dr. Diego Bertani, que instrumentó una aplicación para capacitar a personal de la salud en tareas de intubación rápida en casos de falta de oxígeno.
Acompañando las medidas de flexibilización dispuestas por el Gobierno provincial, implementó un sistema obligatorio de turnos online para evitar la aglomeración de usuarios en sus oficinas comerciales y así prevenir el contagio de COVID19. Luego agregó a este sistema la asistencia de las personas según la terminación de su DNI.
